La última pregunta. (Segunda parte)

Primera parte.

Frente a la ciento quince.


Uno, uno, cinco. Estos eran los números que se mostraban en la puerta que Dani visitaba cada vez que entraba en el edificio. Frente a ella había un médico que revisaba unas notas en su cuaderno. SIn levantar la cabeza el médico miró por encima de sus gafas al visitante. Su cara no pudo ocultar un gesto de molestia que el éste percibió. -"Buenas tardes doctor" dijo Dani con una excesiva amabilidad mientras le ofrecía su mano. El médico bajó la mirada y siguió con leyendo sus notas sin soltar sus manos del cuaderno. -"Puede pasar, el paciente está ya estable para su..., ejem, para su interrogatorio". -"En realidad no voy a interrogarle, pero eso ya lo sabe ¿verdad doctor?". Dani sabía de la hostilidad del médico hacia él, por eso prefería tomar la iniciativa en el ataque mostrando sus cartas. -"Prefiero no saber lo que va a hacer con el paciente, hasta donde a mí me corresponde le he curado de sus heridas y ahora está estable. No me pida nada más". Dani miró por encima del cuaderno de notas del médico. -"¿Y en su historial hay algo que pueda serme útil, una alergia, alguna fobia declarada?". El médico retiró sus notas y cerró el cuaderno con violencia. -"Aquí no hay nada que le interese". -"¿Ha visto alguna lesión muscular que todavía sea reciente?". Sólo quería provocarle, sabía que el doctor jamás le diría nada que le fuera útil. Dani sonrió y sin dejar de mirar al médico llamó al soldado que tenía a sus espaldas. -"Cabo, acompañe al doctor a la salida".

La pareja se alejaba en dirección al ascensor, mientras tanto Dani aspiró, ahora tenía que entrar en la habitación ciento quince.

Continuará.

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