Is good?
Imagina por un momento que estás buscando trabajo. Imagina que un amigo, un amigo de esos de verdad, de los de con "a" mayúscula te dice que conoce a una chica que tiene un contacto en una empresa en la que buscan trabajadores, trabajadores con un perfil como el tuyo.
El contacto que te dan te advierte que al principio las condiciones de trabajo son duras; poco dinero y bastantes horas extras no remuneradas, pero merece la pena. Tú, desempleado y con, no el agua, si no el barro al cuello, no lo piensas mucho y le pides el teléfono de ese contacto.
Hablas con el contacto, un tipo muy amable que te dice que si, que hay trabajo, pero que es en Melbourne. ¿No podría ser en un lugar más lejano? es lo primero que le dices con ironía. Él te contesta que entiende que es lejos, pero merece la pena. Vuelves a oir eso de que hay muchas posibilidades de ascender, que el ambiente en la empresa es bueno, de que incluso hay quienes han ido allí y se han quedado a vivir, se han casado, han hecho su vida. Te dan una dirección y una vez allí haces las respectivas entrevistas, test de aptitudes, charlas con Recursos humanos y una semana después te dan la noticia; has sido aceptado.
Puedes empezar dentro de un mes. Sólo tienes que costearte el viaje, buscar piso en Melbourne y trasladarte allí. Enhorabuena ¿no?
Ya no sabes si aceptar o no. Te lo piensas unos días. Le das vueltas y más vueltas al asunto. Es un cambio importante, es una posibilidad única. Tus ahorros son escasos, apenas llegan para el viaje y el traslado. Tu familia no puede ayudarte ya que andad igual de apurada que tú en cuanto a dinero, pero merece la pena. Aceptas. Dentro de un mes en Australia.
Te despides de tus amigos, tu familia, de todo lo que has visto durante tu vida y prometes una y otra vez que volverás pronto, que no sabrías estar sin tu país, sin tus amigos, sin tu familia. El viaje es largo, molesto y duro. Con el poco dinero que tenías sólo has encontrado un pasaje en turista. Muchas horas de vuelo, pero merece la pena.
Casi un día después llegas a tu destino, te dirijes a la dirección que te dieron en la empresa y descubres que allí no hay nada. No hay empresa, no hay trabajo, no hay nada. El contacto no responde al teléfono, la amiga que te dio el contacto no devuelve tus llamadas. Estás solo en una ciudad extraña, y esto es como una pesadilla. Piensas que será un error y caminas en dirección a tu casa, a tu nueva casa, y ves que en esa dirección sólo hay un solar abandonado. No tienes casa, no tienes trabajo, todas tus cosas están en la mochila que llevas a la espalda.
Reúnes unas monedas y llamas a tu familia, les cuentas lo ocurrido suavizando la situación lo máximo. Tus padres lloran, no pueden ayudarte y lo peor es que no tienen dinero para pagarte un viaje de vuelta y, por supuesto, tú tampoco lo tienes.
Cuelgas el teléfono y mientras observas a la gente pasear por la calle tus pies se clavan tanto en el asfalto que piensas que vas a atravesarlo. Estás solo en un país desconocido, sin dinero, sin pertenencias, sin posibilidad de volver, estafado, engañado.
Es una situación complicada ¿verdad? Pues alégrate de ser europeo y blanco, porque si fueras africano y negro ésta sería tu situación;
Y créeme que sería una situación mil veces peor.
En este documental se habla de la penosa situación de los africanos que no logran llegar a Europa, por lo general a través de España, y quedan atrapados en Marruecos sin posibilidad de volver a su país ni de, por supuesto, pasar a España. Africanos a los que las mafias les vende la idea de un viaje idílico en barco hasta España para, una vez aquí, encontrar trabajo a la semana y empezar a ganar dinero. Africanos que venden todo lo que tienen y, una vez en la patera, comienzan a descubrir el engaño.
EUROPE IS GOOD? es un documental cuya iniciativa ha sido desarrollada por el grupo In-falibles y L´emigrant que ha conseguido llegar a la final en el Extrema´doc.
Mucha suerte en la final e, independientemente del resultado de la misma, el mensaje del documental será siempre el mismo, no olvidemos que Europa con respecto a África es;
-"/.../un barrio de chaléts en una inmensa ciudad de chabolas".
El contacto que te dan te advierte que al principio las condiciones de trabajo son duras; poco dinero y bastantes horas extras no remuneradas, pero merece la pena. Tú, desempleado y con, no el agua, si no el barro al cuello, no lo piensas mucho y le pides el teléfono de ese contacto.
Hablas con el contacto, un tipo muy amable que te dice que si, que hay trabajo, pero que es en Melbourne. ¿No podría ser en un lugar más lejano? es lo primero que le dices con ironía. Él te contesta que entiende que es lejos, pero merece la pena. Vuelves a oir eso de que hay muchas posibilidades de ascender, que el ambiente en la empresa es bueno, de que incluso hay quienes han ido allí y se han quedado a vivir, se han casado, han hecho su vida. Te dan una dirección y una vez allí haces las respectivas entrevistas, test de aptitudes, charlas con Recursos humanos y una semana después te dan la noticia; has sido aceptado.
Puedes empezar dentro de un mes. Sólo tienes que costearte el viaje, buscar piso en Melbourne y trasladarte allí. Enhorabuena ¿no?
Ya no sabes si aceptar o no. Te lo piensas unos días. Le das vueltas y más vueltas al asunto. Es un cambio importante, es una posibilidad única. Tus ahorros son escasos, apenas llegan para el viaje y el traslado. Tu familia no puede ayudarte ya que andad igual de apurada que tú en cuanto a dinero, pero merece la pena. Aceptas. Dentro de un mes en Australia.
Te despides de tus amigos, tu familia, de todo lo que has visto durante tu vida y prometes una y otra vez que volverás pronto, que no sabrías estar sin tu país, sin tus amigos, sin tu familia. El viaje es largo, molesto y duro. Con el poco dinero que tenías sólo has encontrado un pasaje en turista. Muchas horas de vuelo, pero merece la pena.
Casi un día después llegas a tu destino, te dirijes a la dirección que te dieron en la empresa y descubres que allí no hay nada. No hay empresa, no hay trabajo, no hay nada. El contacto no responde al teléfono, la amiga que te dio el contacto no devuelve tus llamadas. Estás solo en una ciudad extraña, y esto es como una pesadilla. Piensas que será un error y caminas en dirección a tu casa, a tu nueva casa, y ves que en esa dirección sólo hay un solar abandonado. No tienes casa, no tienes trabajo, todas tus cosas están en la mochila que llevas a la espalda.
Reúnes unas monedas y llamas a tu familia, les cuentas lo ocurrido suavizando la situación lo máximo. Tus padres lloran, no pueden ayudarte y lo peor es que no tienen dinero para pagarte un viaje de vuelta y, por supuesto, tú tampoco lo tienes.
Cuelgas el teléfono y mientras observas a la gente pasear por la calle tus pies se clavan tanto en el asfalto que piensas que vas a atravesarlo. Estás solo en un país desconocido, sin dinero, sin pertenencias, sin posibilidad de volver, estafado, engañado.
Es una situación complicada ¿verdad? Pues alégrate de ser europeo y blanco, porque si fueras africano y negro ésta sería tu situación;
"EUROPE IS GOOD? Bloqueados en Marruecos" Trailer 02 Documental from in-falibles on Vimeo.
Y créeme que sería una situación mil veces peor.
En este documental se habla de la penosa situación de los africanos que no logran llegar a Europa, por lo general a través de España, y quedan atrapados en Marruecos sin posibilidad de volver a su país ni de, por supuesto, pasar a España. Africanos a los que las mafias les vende la idea de un viaje idílico en barco hasta España para, una vez aquí, encontrar trabajo a la semana y empezar a ganar dinero. Africanos que venden todo lo que tienen y, una vez en la patera, comienzan a descubrir el engaño.
EUROPE IS GOOD? es un documental cuya iniciativa ha sido desarrollada por el grupo In-falibles y L´emigrant que ha conseguido llegar a la final en el Extrema´doc.
Mucha suerte en la final e, independientemente del resultado de la misma, el mensaje del documental será siempre el mismo, no olvidemos que Europa con respecto a África es;
-"/.../un barrio de chaléts en una inmensa ciudad de chabolas".
Comentarios
Así las cosas sólo queda, supongo, tomar la mano del que esté mas cerca y ayudarlo en lo que necesite o permita.